02 enero 2009

RENFE : algo que contar


Interior de un vagón

He llegado a la conclusión de que RENFE contrata a a un pesado/a o grupo de ellos, por cada viaje largo. Es una especie de campaña para que tengas algo que contar nada más bajar del vagón, olvidándote así de si el tren ha llegado con retraso o el mal olor del retrete del vagón en que ibas.

Al contrario que la penúltima vez, este era un treintañero con uniforme de tirado (palestino y vaqueros rotos) mirada y hechuras de loco, el cual se dedicó a contar a grandes voces el por qué de su viaje. Pudimos así las veintitantas personas que ibamos en el vagón, enterarnos que estaba separado y el tío de su ex mujer iba a acompañar a su hijo (al del pelma, no al del tío) hasta las estación de Atocha desde Bilbao, para que lo recogiera y volvérselo a traer a Cartagena. Además, en las cinco horas de viaje escuchamos la narración de su infancia y aprendizaje y de como él "educaba de la mejor manera a su hijo no dándole todos los caprichos", del pueblo que era, el nombre de su padre, madre, hermanos... etc. Para colmo intentaba ser servicial, ofreciéndole botes de Coca-Cola gratis a los hijos de una pobre madre para "que no los timaran en el vagón restaurante, ¡que son todos unos cabronesy unos chorizos!" o ayudando a bajar la maleta a una monjita entre gritos de "¡SEÑORA!¡SEÑORA! ¿Le llevo la maleta?"

En fin, que cuando llegamos a Atocha, el imbécil se bajó junto al resto del vagón y mientras lo veía desaparecer por las escaleras mecánicas del andén, pensaba la desgracia de tener un padre así y lo agusto que tiene que vivir el niño en Bilbao, tan lejos de su padre.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sí, a mí me han contratado para el día 6 y el trabajo consiste en: llevar unos pollos a Alcalá de Henares, vivos, en la capaza. Llegaré tarde, y el tren saldrá con retraso porque me dará por vomitar , así es que, llévate bolsa de plástico.

Feliz vómito, digo año, amigo